EL CALVITERO, TECHO DE CÁCERES.



El día de los Santos decidimos hacer una escapada unos días. El valle de Ambroz, al norte de la provincia de Cáceres fue el lugar elegido y como no,  busqué  una ruta para disfrutar de lo que me gusta.
Ya que estábamos  cerca de la sierra de Béjar y la Covatilla decidí hacer la subida al Calvitero, el techo de Cáceres.

A las 8:00 llego a la Plataforma del Travieso, punto de partida. El coche marca 3º, viendo el viento y las nubes que hay en altura decido abrigarme bien y comenzar la subida.






Llego a un pequeño manantial, lo cruzo y continúo por el sendero. A unos 400 metros del manantial hay una bifurcación,  uno lleva por el camino conocido como las Zetas y otro hacía los antiguos remontes de Candelario, mas técnico, pero eso a los traileros es lo que nos gusta.







Tomo ese sendero, rodeado de piornos, paro un momento y puedo observar toda la sierra de Béjar y el pantano de Navamuño.







Alcanzo la parte de arriba, llego a un clareo y miro mi reloj, en 2 km he ascendido 500 m.
Aprovecho un llano para correr  y veo frente a mí el Canchal de la Ceja cubiertos de un mar de nubes. Aire, frío  y poca visibilidad  es lo que me espera.







Me paro a pensar si debo continuar o no. Desconozco la zona, voy solo y la visibilidad es escasa. A pesar de llevar la ruta en el gps prefiero no arriesgar.  Corro  por zonas visibles y disfruto las vistas que me ofrece esta maravillosa sierra  a 2400 m de altitud.





 Con algo de sufrimiento llego al paso del diablo, una zona de paso con  rocas y cadenas donde decido no continuar.  Debido al hielo que hay, creo que puede ser peligroso y no quiero arriesgar. Aprovecho para sacar unas fotos y grabar algún video sin tardar mucho en iniciar el descenso ya que las nubes empiezan a cubrir toda la montaña y el viento es más fuerte.





Pronto llego al llano y tras él la zona de piornos, donde empieza una bajada técnica de 2 km  en la que disfruto como un enano.  Después de un mes sin correr por montaña ya echaba de menos eso de esquivar piedras, ramas, recortes y esas vistas que a los amantes de la montaña nos atrapa.  Paro en el manantial para beber agua y me dejo caer hasta la Plataforma del Travieso donde ya comenzaba a llegar gente para hacer senderismo.


Quedé enamorado de esta montaña pensando que el año que viene volveré y coronaré el Calvitero pero esta vez para competir  en el Ultra de la Covatilla.
Ultra Trail Sierra Del Segura.




Desde el día que vi información de esta carrera, algo dentro de mi decía que sería una gran prueba, ya en el Ultra Bosques del Sur la gente hablaba de ella y todos los comentarios eran formidables. Lo pensé, lo valoré y decidí apuntarme.

Llegamos el viernes 22 sobre las 14:00 a Pontones, sacamos el equipaje del coche, comemos y mi mujer y yo nos dirigimos a Santiago de la Espada a recoger el dorsal. Soy de los primeros, me dan dorsal, bolsa de vida, GPS, bolsa de corredor etc. Salimos del recinto y alguien de la organización nos enseña los trofeos. Nos quedamos con la boca abierta, jamás había visto esos trofeos, unas figuras de madera maciza, feos pero preciosos a la vez, deberían pesar unos 20 kilos. Esos eran para el primer clasificado masculino y femenino, para el resto los trofeos eran igual pero de menor tamaño, ya se veía la dedicación y el tiempo invertido por la organización.










La noche del viernes me costó dormir. A las 04:15 me levanté, desayuné y preparé todo el material. Marchamos a Santiago de la Espada, pasé por la zona de comprobación de material y esperé al pistoletazo de salida bastante tranquilo.

A las 06:00 dieron la salida neutralizada hasta la salida de Santiago, vamos trotando todos juntos, hablando, riendo hasta que cogemos una pista y las liebres comienzan a desmarcarse del resto. Comienzo subiendo, temperatura suave, frontal en la cabeza y sin saber lo que me depararía el día.










Asciendo hacía el Cerro de las Ánimas (1788mt) corono y bajo por el Barranco de Navas, voy bien, tranquilo no tengo prisa, la carrera es larga y acabo de empezar. Comienza a amanecer, apago el frontal y ya se ve al fondo El Almorchón  (1917mt ) lástima que no podamos llegar a él por no dar la administración  la autorización correspondiente. Paso por un sendero, a unos 1700mt  dejándolo de lado. Me uno a un grupo de 3 corredores durante unos 5 km,  pero decido reducir, el ritmo que llevan es alto, esa no es mi carrera.
Pasan los km y llega a mi altura un corredor que ya conocía, Miguel Ángel Blázquez, el cual se alzaría con la victoria de esta prueba.  No tengo palabras para definir la carrera que se marcó, de menos a más. Íbamos por el km 25 hablando, comentando que el ritmo de carrera era muy alto que iba a ir tranquilo, el estaba fuerte y se fue, yo preferí ir a mi ritmo,  y con unos 16 corredores por delante y con una gran remontada consiguió llegar en primer lugar. Me quito el sombrero.

Continúan pasando los km y comienza un ascenso zigzagueante hasta el Collado Toladillo. Quedé impresionado con las vistas que me ofrecía  del pantano del Tranco y Peña mujo, era algo indescriptible. Sin palabras  me dejó el avituallamiento,  cuando de repente me encuentro un caballo y 3 hombres de lo más simpáticos. Por la dificultad del terreno llevaban los alimentos en caballos, una pasada!







Comienzo un descenso hasta Pontones, km 50, avituallamiento  donde tenía ganas de llegar ya que mi familia estaría allí esperando, sobre todo mi hijo Pablo. Cuando entro a  Pontones miro el reloj y me doy cuenta del ritmo tan alto que llevo, 50 minutos más rápido de lo planeado, espero que no me pase factura, pienso.
Como algo rápido, le robo a Pablo los bastones (que obsesión tiene con ellos!!!! )  me despido y continuo la marcha.









Crónica de una muerte anunciada.
No habría corrido ni 4 km desde Pontones cuando empiezo con calambres en cuádriceps y gemelos, se empiezan a cargar, saco de la mochila las musleras y perneras de compresión, me las pongo y continuo pero cada vez el dolor es mayor. Me cuesta correr, decido bajar el ritmo pero nada, las bajadas me matan, apenas puedo andar y menos aún correr, me planteo abandonar, pero no quiero, voy 13º y llevo a 3corredores a unos 200 m.

Comienzo a dar vueltas a la cabeza, a pensar que esto ya me lo olía, “ Raúl llevas 3 ultras, 2 medias maratones, otras tantas de 10 km y unos cuantos trails en 5 meses, ¿qué esperas? “. Ya se lo había comentado a Rosa (mi mujer ), amigos y compañeros del club, creo que me pasado de rosca, estoy todo el día cansado, no tengo ganas ni de entrenar, esto me pasará factura y así fue.
La idea del abandono es mayor y decido dejarlo, no puedo más, saco el teléfono de la mochila , llamo a Rosa y se lo comunico, ella sabe perfectamente lo que tiene que hacer conmigo ante estas circunstancias. Por problemas físicos no hay marcha atrás.  Si es mental , en otras ocasiones, bastante dosis de psicología es la solución. En el avituallamiento de Huelga-Utrera ( 61 km) les espero. A duras penas llego y mi sorpresa es que no están allí.  Busco zona de cobertura, la llamo y estaban en La Toba por qué no los  habían dejado llegar al avituallamiento en coche. Kiko, un miembro de la organización oye la conversación y le dice que no se preocupe que el va a Huelga-Utrera a recogerme. No pasaron ni 5 minutos cuando llegó a por mi. Por el camino a La Toba le transmití lo  impresionado y el buen sabor de boca que me había dejado esta prueba y le transmití mi más sincera enhorabuena por todo el trabajo realizado. Llegamos a La Toba y allí estaban esperando Rosa, Capitán Mollete ( mi hijo Pablo) y mis suegros. Kiko me dijo que había pasta y bebida que estaba a mi disposición y que el año que viene esperaría no tener que volver a recogerme.
Comí algo  y volvimos a Pontones a darme una ducha y pensar en lo regular que había planeado esta temporada y a pensar en la siguiente.

P.D. No quiero ser pelota ni buscar una invitación para el año que viene, o si, ( es broma) pero quiero dar, como participante, mi enhorabuena a toda la organización del Ultra Sierra Del Segura  por el gran trabajo realizado, el cuidado en los detalles pasando por la bolsa del corredor, los trofeos, balizamiento perfecto, la preocupación por el corredor, avituallamientos, los voluntarios que sin ellos no sería posible, los miembros de protección civil y las fuerzas de seguridad, la administración,  todos los habitantes del termino de Santiago-Pontones por su acogimiento, simpatía, por volcarse en una prueba que por un fin de semana da vida a esa zona. Desde el punto de vista de los acompañantes, mi mujer me acompaña a todos los ultra y para ella el seguimiento por GPS es algo tranquilizador, la programación para el acompañante con los puntos para seguir la carrera, direcciones, distancias entre un punto y otro. Quiero dar las gracias en nombre de mi mujer y en el mío propio a Francis y Kiko por el trato recibido. Solo me queda dar mi opinión personal a la organización para que continúen por este camino, organizando una prueba de nivel como esta lo es, haciendo hincapié en la calidad y no en la cantidad de corredores que pueda acoger la prueba y no perder la esencia de prueba de excelencia a nivel regional y porque no nacional. Continuar con el trabajo realizado hasta ahora porque una 1º edición que salga de 10 no lo consigue todo el mundo.

Es la organización la que suele dar las gracias a los corredores por elegir su prueba, pero esta vez y creo que en nombre de todos los que participamos os damos las gracias a vosotros por un fin de semana inolvidable.

Porque me gusta correr.


Esta es mi primera entrada del blog, donde trataré de explicar los motivos por los cuales estoy enamorado de este deporte. Lo reconozco, estoy enganchado, enganchado al trail running y en especial a los ultras.



Correr se ha convertido en algo necesario en mi vida, igual que respirar, aún más correr por la naturaleza, es una experiencia que me transporta física y mentalmente a otro mundo. Estar a 2000 metros  y ver lo insignificante que eres ante la grandeza de la naturaleza que te rodea, el silencio, la fauna….


Mi pasión son los ultras. Estos te llevan a conocer tu cuerpo, tus límites, tus puntos fuertes y ver lo que uno mismo es capaz de hacer. A los extremos que puedes llevar tu cuerpo y ver como este reacciona. Ver que tu cabeza manda sobre tu cuerpo y aunque diga que no puede más, que te falta el aire, que tus piernas no reaccionan, si tu cabeza dice que si, será si.


¿De que voy hablar en el blog?

En este blog plasmaré mis aventuras y desventuras en este mundillo, crónicas de mis carreras a nivel competitivo y de ocio (gastronomía, alojamientos etc)  material que utilizaré, opiniones personales etc. En resumen todo lo que rodea al mundo del Trail.

Welcome, lest go.